Hola ¡¡Chicuelas y Chicuelos!!.
Aquí estamos de nuevo, esperando que te encuentres bien y superando la nueva normalidad.
Este Trimestre quiero hablarte de un movimiento artesanal, y que ha sido para mí una de las bases de inspiración de nuestro proyecto. Y es que el mundo de la moda le ha dado este nombre de «CRAFTCORE” a:
una tendencia sostenible, ética y artesanal, que luego de un año de pandemia, ha recuperado el interés por el DIY (el yo mismo lo hago), la artesanía y el upcycling.
Quisiera dejar claro, que una tendencia no es copiar lo que otros usan, es una manera de ver que es lo que esta pasando en el mundo, y de que manera las personas se están moviendo y hacia dónde van sus sentimientos.
El CarftCore, ha devuelto esas ganas por romper el reinado de la fast fashion y las tendencias de corta duración. Entendamos de una vez, que el coser, tejer, bordar, cocinar entre otras, son actividades que se habían quedado en verbos que utilizaron padres y abuelos de una generación que ha nacido con un CHIP y que, en vez de moverse en una sociedad humana, se mueve entre redes sociales en un mundo llamado internet y no PLANETA TIERRA.
Esta tendencia ha estado cambiando el estilo de vida y no solo la forma de vestir de las personas fashionistas alrededor del mundo, se trata de un movimiento que busca:
- Promover el reciclado de ropa de segunda mano o el llamado Upcycling.
- Diferenciar los tejidos que no generen desperdicios.
- Buscar opciones personalizadas a su justa medida.
- Interesarse por QUIEN, COMO y DONDE se hace.
- Valorar el trabajo hecho a mano.
- Apostar por un trabajo digno y comercio local.
- Buscar calidad y no cantidad.
- Recuperar tradiciones en pro de conservar las culturas.
En fin, Chicuela, que por movimientos como este y otras cosas que nos inspiran desde este mi humilde proyecto, tan solo quiero mostrar el VALOR que nos mueve a crear para ti auténticas joyas, como yo las llamo, de las que no pueden existir dos iguales.
Y me despido hasta el próximo trimestre, tan sólo deseando que este movimiento NO se quede en tendencia y se vuelva nuevamente a dejar de lado como un recuerdo que nos ha dejado un año de aislamiento. Quiero y deseo que se convierta en motivo de inspiración de esta y nuevas generaciones. Siempre habrá algo que coser, tejer, pintar o pegar, para darle la durabilidad y una nueva oportunidad a esa prenda que tanto se lo merece.
Recuerda que más hace el que quiere queriendo, que el que puede pudiendo.
Hasta la próxima,
La Maracucha.